Querían dejarlo todo, huir sin dejar rastro. Pero no se puede luchar contro lo que se es. Una de las dos acabó escribiendo a casa.
Soy muy miope. Eso significa que tengo muy mala vista, pero también los ojos muy grandes. Estas son algunas de las cosas que veo.
¿Dónde?
En Friedberger Platz. Ahí estaban, de buena mañana, pegaditas a la verja. Seguramente esperando el taxi.